Retos y riesgos de muerte en el tránsito migratorio
Se estima que en el mundo hay cerca de 281 millones de personas migrantes (IOM, 2024). De acuerdo con la Unidad de Política Migratoria de la Secretaría de Gobernación, durante 2024, se registraron 925 mil personas migrantes, quienes dejaron sus países de origen por diversas causas, como la inestabilidad política y económica, la inseguridad, el crecimiento de pandillas, la violencia relacionada con el narcotráfico, la pobreza, la discriminación y la falta de acceso a sistemas de salud, entre otros factores.
Las personas migrantes enfrentan desafíos en cada etapa del proceso: desde la salida del país de origen, el tránsito por los territorios de paso, hasta la llegada al destino. Al respecto, Manuel Villegas, Coordinador del programa de Licenciatura en Relaciones Internacionales del Campus San Rafael de la UVM, señala: “Los migrantes se enfrentan a todo el espectro de lo que se conoce como delincuencia organizada tradicional, a grupos de narcotraficantes, a personas que se dedican a la trata de personas… y también a la estigmatización, el rechazo por parte de algunos sectores de la población”. Aunado a estas situaciones, las personas migrantes enfrentan en su trayecto condiciones climáticas extremas, deshidratación, riesgos de ahogamiento, enfermedades y otras circunstancias que en conjunto ponen en riesgo la vida e integridad de las personas.
Desde 2014 la Organización Internacional para las Migraciones ha registrado los fallecimientos de personas en condición de migrantes. Desde entonces, se han documentado más de 63 mil muertes y desapariciones, aunque posiblemente se trate de sólo una fracción de la cifra real. En 2023, 14% de estas muertes y desapariciones se ubicaron en la región de América (8,984).
A nivel global, los decesos documentados aumentaron de 5,289 en 2014 a más de 8,500 en 2023, el año con la cifra más alta registrada. En la frontera México-Estados Unidos, los fallecimientos en 2023 ascendieron a 628, un incremento del 18% en comparación con los 531 de 2014. No obstante, 2021 fue el año más mortífero, con 734 decesos, la mayoría atribuidos a causas desconocidas, seguido por condiciones medioambientales adversas, deshidratación, falta de alimentos y ahogamientos.